Las denominadas bodas del #Covid, tienen un denominador común, están centradas en lo que de verdad importa: el amor.
Por ello, desde el blog Una Boda Deseada, hemos detectado nuevas tendencias en todo lo que rodea el universo nupcial, en especial de la novia. Ahora más que nunca ha puesto en primer plano poder dar el sí quiero al amor de su vida y estar rodeada de los suyos, quitando importancia a los looks demasiado preparados.
En este sentido, han surgido nuevas modas, comportamientos y actitudes, que ponen en la palestra a una novia mucho más pragmática, sencilla y natural. En definitiva, sin tantos artificios.
Hoy os presentamos algunas de ellas, relativas a su outfit nupcial: vestido, peinado y maquillaje.
Vestidos de novia
Los vestidos de novia diseñados y creados en la era Covid-19 son mucho más informales, cómodos y versátiles. Los cortes rectos, las líneas simples y depuradas están siendo los favoritos. También las telas naturales y la ausencia de ornamentación. Se prefieren los tejidos lisos a los encajes, brocados y drapeados.
En definitiva, se opta por looks mucho más versátiles, con los que sentirse ellas 100% y que poder utilizar en otros eventos posteriores.
Muchas de ellas se decantan incluso por trajes de chaqueta y pantalón o vestidos midi. Dos propuestas que han cobrado fuerza, y que estamos viendo mucho en las redes y en casos reales de bodas ya celebradas. ¡Originalidad, modernidad y comodidad a partes iguales!
Imágenes de Jesús Peiró
Peinado
En cuanto al pelo, ocurre algo parecido. Las novias quieren sentirse ellas, a gusto, cómodas, y sin demasiados artificios. En general, vemos peinados ligeros y naturales, que buscan un resultado informal, pero cuidado.
Para llegar a ese punto, sí hay que tratar y mimar el cabello con anterioridad. Digamos que se realiza un trabajo previo, para que ese día la melena luzca radiante, hidratada y brillante.
Uno de los peinados estrella está siendo el pelo suelto con onda. Una propuesta elegante, que suele sentar bien a la mayoría de novias, sea cual sea la longitud del pelo y la forma de su rostro.
También lo moños de bailarina. Un peinado fácil y muy versátil, que favorece a todo tipo de novias y que encaja en cualquier estilo, desde los más clásicos a los más modernos. Este peinado se ha convertido en uno de los favoritos de los diseñadores de novias, que lo incluyen en la mayor parte de sus catálogos y desfiles, ya que permite dar al vestido el protagonismo que merece. Un aspecto que las novias del Covid-19 han sabido detectar.
Imágenes: Marla Hair Style, Mar Photography.
Maquillaje
Por lo que hace al maquillaje, la sencillez y naturalidad son las protagonistas absolutas. Las novias optan por una paleta cromática reducida a la mínima expresión, en tonos nude, marrones, tierra y colores muy cálidos. El objetivo es tener una piel con un aspecto natural.
Por ello, las bases de maquillaje favoritas serán las fluidas, ya que aportan luz y frescura a la piel. Además, para dar un aspecto más jugoso, se utilizará el iluminador en zonas clave. No es necesario cubrir del todo el rostro, sino jugar con un efecto luces y sombras que potencien esa belleza natural. Y es que nuestras “imperfecciones” y señas de identidad (pecas…) no hacen que nuestro rostro sea imperfecto, sino único y especial.
Cejas y pestañas también cobran protagonismo. En ellas, se busca un efecto natural, pero que esté muy cuidado. Por eso se diseñan previamente, porque son dos puntos muy personales que definen y marcan la armonía de nuestro rostro.
Además, debido a la pandemia, se potenciarán mucho más los ojos que los labios. Y es que la mirada es la nueva sonrisa. Pero siempre con colores muy naturales, sin demasiado artificio. Para los labios, los gloss serán los grandes aliados.
En definitiva, la naturalidad abarca todo: desde el vestido, el peinado y el maquillaje. Ahora solo tendremos que ver si esta tendencia será pasajera o ha llegado para quedarse. Como en todo, solo el tiempo lo dirá.
Imágenes de Laura Martínez.
Autora: Beatriz Fernández de Una Boda Deseada.