Si la anterior semana os hablamos de los vestidos con plumas, este viernes nuestro consejo de moda se centra en los vestidos de novia con flores. Y es que, si bien las plumas pueden asociarse a un época más invernal, las flores salpican los diseños nupciales de todas las estaciones y siguen estando de actualidad temporada tras temporada.
Imágenes vía Oncewed
A la largo de la historia, el vestido de novia ha presentado una gran diversidad de formas, colores y estilos, siendo las flores uno de los elementos ornamentales del mismo por excelencia. En 1840 la reina Victoria de Inglaterra sentó las bases para hacer del blanco el color nupcial, y lo hizo precisamente con un diseño de satén blanco de casi seis metros de cola y bordado con flores.
Especialmente indicadas para las novias más románticas, las flores son un elemento de lo más versátil, y podemos verlas de todo los tipos y formas. Ya sea estampadas, como en este diseño de Raimón Bundó, o aplicadas en el vestido, las flores transmiten esa inocencia tan natural.
Vestidos de novia de la línea Ir de Bundó de Raimon Bundó y Carla Ruiz en la pasada edición de la Pasarela Gaudí Novias.
El encaje bordado con flores es quizás la opción preferida por muchas novias a la hora de lucir las flores. Elegantes y sofisticados, estos delicados bordados se muestran en todo tipo de mangas, en el cuerpo y también en relieve con delicadas aplicaciones de guipur en faldas de tipo princesa, consiguiendo una imagen perfecta para las más tradicionales.
Vestidos de novia de Cymbeline y Aire Barcelona.
La riqueza de las de flores, sus pétalos, los jardines y el universo natural ha sido en múltiples ocasiones la perfecta fuente de inspiración de los diseñadores a la hora de crear sus nuevas colecciones, dando vida a diseños que son auténticas joyas en flor. Y es que el romanticismo que desprenden es el mejor aliado para una novia enamorada el día de su enlace.
Vestido de novia de Pronovias.
Tanto si vas a realizar una ceremonia civil como religiosa, las flores pueden formar parte de tu diseño nupcial. En diseños cortos de líneas más sencillas o bien en otros largos y más barrocos, deberás adaptar tu vestido al tipo de celebración que desees realizar. Eso sí, como siempre te aconsejamos, si eres más bien bajita, no te decantes por flores de gran tamaño para tu vestido, e intenta también que éstas sean más bien discretas si tu figura no es demasiado estilizada; con una ornamentación floral sutil y delicada el resultado será mucho más elegante.
Vestidos de novia de Maggie Sottero y Cosmobella.
En encaje, chiffon, tul, gasa, bordados o brocados, las flores están de plena tendencia. En la actualidad, la apuesta por el espítiru vintage, la recuperación del movimiento hippie de los 70 y la búsqueda de una imagen cada vez más romántica de la novia ha devuelto a las flores el protagonismo que no obstante nunca había perdido. Para acertar en cada look, la clave estará en combinar con armonía y sin excesos el estilo de vestido con el resto de complementos como las joyas, tocados o el ramo de la novia.
Vestidos de novia de YolanCris y Rosa Clará.
Y para aquellas que prefieren un diseño más bien liso, pero con algún detalle floral, las aplicaciones de flores a la cintura, en la espalda o en el tirando pueden aportar ese toque de distinción que buscan. Una capa bordada totalmente con motivos florales, una gran flor en la torera o a modo de cinturón pueden ser una buena opción para no prescindir de ellas en un día tan especial.
Vestidos de novia de Carla Ruiz, Cymbeline y Demetrios.
¿Os gustan las flores para vuestro vestido de novia?