Y seguimos descubriendo talentos más allá de nuestras fronteras. Hoy le toca el turno a Sarah Janks y la nueva línea de vestidos que presentó hace unas semanas en la ciudad de Nueva York. La colección de vestidos de novia de la diseñadora surafricana, Forget Me Not (nomeolvides) toma el nombre de la flor alpina azul de centro amarillo que simboliza el recuerdo y la trascendencia. Algo que una novia puede desear al buscar su vestido: ser recordada. La delicada colección de vestidos de novia para el otoño-invierno 2014 de Janks se ve muy influenciada por la alta costura, por el cuidado de los materiales y la suave contraposición de texturas. El resultado es una línea romántica e increíblemente femenina, en la que la figura de la mujer toma una especial importancia con los vestidos de silueta sirena y ceñidos.
Tejidos delicados que se ciñen al cuerpo
Los tejidos que se superponen son delicados y suaves como el tul fino, el satén dorado o el encaje con apliques florales. Los primeros que nos han sorprendido han sido los vestidos en satén color champán, muy poco habituales esta temporada donde el otro color además del blanco ha sido indiscutiblemente el rosa. Estos diseños se ciñen al cuerpo y se complementan con detalles en encaje del mismo color creando siluetas vintage y de cierto aire lencero.
Vestido de novia Daxa.
Vestidos con espaldas descubiertas
Otra de las características de estos diseños es la espalda descubierta que toma una relevancia importante en toda la colección. Tanto el modelo de arriba como el de abajo son diseños de líneas limpias y suaves pero a la vez ceñidas, siendo el resultado una femenina sofisticación que es a la vez ingenua y sensual.
Vestido de novia Dominique.
Detalles de pedrería en el vestido de la novia
Otro de los puntos fuertes de la colección otoño-invierno 2014 es sin duda los vestidos de novia con apliques de pedrería y encaje. Tanto en blanco como en champán, estos diseños son sin duda los más trabajados. Los tipos de apliques varían mucho pero en general son sutiles y superpuestos a telas con más cuerpo. Al tratarse de tules finos y muselinas los apliques resaltan mucho y aportan una caída muy natural, como es el ejemplo del modelo Daphne, el primero de los de abajo.
Vestidos de novia Daphne, Dulce y Daisy.
En esta línea dentro de la colección no escasean las espaldas descubiertas que como ya hemos comentado antes es uno de los puntos más recurrentes. En este caso se trata de escotes ilusión recubiertos de tul decorado, consiguiendo un efecto glamuroso y sofisticado.
Vestidos tradicionales
Por último encontramos la cara más clásica de la diseñadora Sarah Janks en este vestido de novia de palabra de honor y en los dos de abajo. Estos serán la opción perfecta para las novias más tradicionales y que no quieran arriesgar en su boda.
Vestidos de novia Davinia, Delilah y Deandra.
Para acabar os dejamos nuestro favorito de la colección, el modelo Dahlia de corte muy favorecedor, espalda al aire y apliques de pedrería. La falda con volantes de tul suave es muy original y reúne muy bien la esencia de esta colección de vestidos de novia Forget me not de Sarah Janks.
